Salida dominguera

Antes unos agarraba los muchachos y los metía dormidos en el carro y salía feliz de la vida para cualquier lado.

Ahora en tiempos de adolescencia la cosa es diferente.

Llevo desde temprano levantando a estos flojos adolescentes con el único fin de llegar temprano a Valencia al cumpleaños de mi cuñada y nada que se apuran.

Como dice el comercial aquel... ¡Qué tiempos aquellos!