lunes, mayo 31, 2010

Alcabalas de quincena

A veces quiero creer que las alcabalas de la policía sirven para algo. Pero como nada más aparecen cuando es quincena creo que ese algo como que no es muy legal que digamos.

El Estado venezolano hace un esfuerzo increíble en esto de las alcabalas. Por todos lados ponen grupitos de policías, guardias nacionales o fiscales de tránsito para detener vehículos y "pedir papeles". ¿Sirve para algo esto? sirve al menos para que la gente esté mosca en tener todo en regla. Porque para circular libremente por las calles de nuestro país tenemos que tener vigente la cédula de identidad, el certificado médico para conducir y el título de propiedad del carro o el carnet de circulación, que es más o menos lo mismo. Y si nuestro vehículo es de carga tenemos que tener otro poco de papeles más como la factura comercial de la carga, permiso de transporte expedido por tránsito, y otros permisos que pudieran aplicar dependiendo de lo que uno lleva. Si algo no está en regla lo amenazan a uno con detenerle el vehículo, confiscarle la carga y llevarlo a uno "al comando".

Yo coincido con las autoridades que todo este papeleo ayuda a poner un poco de orden o control a nuestras carreteras y caminos. Ayuda también un poco a controlar las posibles ilegalidades. Pero lo que no coincido con ellos es en las prioridades. Tenemos un grave problema de seguridad en nuestro país. Acá se secuestra gente, se mata gente, se roba gente de la manera más impune. El problema está allí, no en que la gente tenga los papeles en regla. Allí es donde hay que destinar los recursos estatales, no es poner alcabalas para saber si alguien no ha renovado la licencia o si anda con el carro que le prestó el primo.

Pero como Uds. ya sabrán, el "negocio" está en la pedidera de papeles. Porque como a nadie le gusta que se le complique la vida por una licencia y a nadie le gusta "ir al comando" pues todo se resuelve con un billetico que se deja en la alcabala, "pa los refrescos".

Este negocio parece ser demasiado bueno. Tan bueno que todo lo demás se descuida. ¿Para qué andar por ahí haciendo profilaxis social y andar atrapando bandidos? Lo mejor es atrapar infractores de tránsito y poner multas que nunca llegan al erario nacional... llegan a los bolsillos de los funcionarios de las alcabalas.

jueves, mayo 06, 2010

Singularidad Tecnológica



Un avanzado robot fabricado por seres inteligentes del planeta Tierra explora el vecino Marte. Opportunity, el nombre del robot, es una compleja sonda casi autónoma diseñada para explorar rocas marcianas. Es capaz de deambular por el terreno marciano y analizarlo usando avanzados instrumentos. Posee además un sofisticado sistema de telecomunicaciones con el cual envía fotografías de alta resolución y datos sobre la química de las rocas marcianas y sobre la metereología del lugar. Oppy, su diminituvo por cariño, es controlado desde la Tierra. Científicos e ingenieros le envían instrucciones sobre que hacer desde una distancia que en la actualidad es de casi doscientos millones de kilómetros. Oppy ha estado explorando Meridiani Planum los últimos seis años, en los cuales ha recorrido calmadamente un poco más de veinte kilómetros. Oppy depende de la luz solar para mantener su temperatura de funcionamiento y alimentados todos sus circuitos eléctricos, siendo por supuesto su cerebro una compleja computadora capaz incluso de tomar decisiones de navegación por si sola.

Pero la pregunta que muchos nos hacemos cuando vemos maravillados lo que puede hacer Oppy y su hermano gemelo Spirit quien está del otro lado del planeta Marte en el cráter Gusev, es si estos avanzados robots piensan. Aunque sea un poquito. ¿Cuándo consideramos que una máquina es "inteligente" desde el punto de vista humano?

Es una importante pregunta. Claro que la respuesta es no. Ni Oppy ni Spirit piensan o están remotamente cerca de pensar. Son autómatas programables. Pero muy avanzados. Hacen cosas que hace décadas ni siquiera nos imaginaríamos en una máquina. Como por ejemplo esquivar obstáculos en el terreno marciano nada más "viendo" como lo haría una persona, o un animal terrestre. Es un gran avance y lo utilizamos para explorar otro planeta sin necesidad de enviar a un frágil astronauta y exponerlo a la rudeza de otro mundo. Pero no piensan.

La inteligencia artificial es algo que durante muchos años ha estado en el terreno de la ciencia ficción. Pero creo que poco a poco se están dando avances hacia allá. Cada vez más el hardware de las computadoras es más veloz y poderoso, cada día se escribe más y mejor software. Allí es cuando uno tiene que revisar conceptos interesantes como el de la Singularidad Tecnológica. En algún momento podremos fabricar máquinas tan o más inteligentes que los seres humanos y estas a su vez podrán fabricar otras más inteligentes todavía y habrá una explosión de inteligencia artificial. Estas ideas me han hecho reflexionar sobre dos cosas interesantes.

La primera es que la tecnología actual está siendo desarrollada completamente por el cerebro humano que es una máquina que piensa cuya base es biológica. Además sabemos que el cerebro humano ha permanecido más o menos constante durante milenios. No somos mucho más inteligentes que nuestros antepasados egipcios que construían pirámides hace ya milenios. En lo que construyamos máquinas más inteligentes que nosotros, la tecnología que estas máquinas serán capaces de desarrollar será prácticamente incomprensible para nuestro limitado entendimiento. Habrá un desarrollo exponencial de tecnologías nuevas que cambiará todo. Esto es una singularidad tecnológica.

La segunda es la siguiente. Supongamos que todas las civilizaciones del universo pasan por recorridos parecidos al nuestro acá en la Tierra. Todas comienzan con coacervados y poco a poco van evolucionando en seres inteligentes capaces de crear computadoras y radiotelescopios por decir dos cosas. En el transcurso de unos cuantos miles de millones de años son capaces de llegar más o menos a donde estamos nosotros actualmente pero en algún momento experimentan la siguiente singularidad tecnológica y crean máquinas, no biológicas, que piensan y son más inteligentes. Son estas máquinas las que podrán explorar el espacio y conquistar planetas, estrellas y galaxias. Es posible que las civilizaciones extraplanetarias sean no biológicas. Máquinas pensantes muy avanzadas capaces de replicarse. Y además que no respiran ni les afecta el paso del tiempo. Ideales para la conquista del espacio. Algo sabemos de ello ya que dos robots nuestros viven en Marte desde hace tiempo y siguen conversando con nosotros.

La foto es de Oppy y una roca llamada Isla Marquette que al parecer proviene de las profundidades de la corteza marciana. La marca que tiene la roca es de la herramienta abrasiva de Oppy y mide unos cinco centímetros de diámetro. Cortesía de NASA y el JPL