jueves, marzo 15, 2007

Tráfico



En estos días he estado algo ocupado con un proyecto que tengo. Me la paso de la casa a la oficina, de la oficina a la casa, los mediodías al colegio a buscar chamos, y, ocasionalmente, visitas a la clínica donde tenemos instalado el software motivo del proyecto. Eso me tiene sumido en una rutina de tráfico algo aburrida.

Es que el tráfico entre mi casa y la oficina se ha vuelto un poco más insoportable de lo normal. Y eso que puedo ir a la oficina usando dos vías: o la intercomunal Turmero-Maracay llena de semáforos y algunos cuellos de botella, o la también congestionada Autopista Regional del Centro con sus cotidianos accidentes y muertes. El método que uso para elegir la vía es estrictamente científico. Bueno, no me crean, uso el viejo método del tin-marín. La probabilidad de encontrar un embotellamiento es más o menos la misma por cualquiera de las vías así que el azar o mi estado de ánimo es el que determina que opción usar.

No todo es malo con esto de vivir en tráfico. Son embotellamientos bastante diferentes a los que sufren los caraqueños. En primer lugar el aire es bastante más puro por aquí. También el paisaje es más campestre y si bien no tenemos al Avila tenemos la hermosa cordillera con el parque nacional Henri Pittier. Uno se vuelve contemplativo, el paisaje hace que uno admire la naturaleza aragüeña con cada vez más emoción. También uno se vuelve más comunicativo ya que en esas aburridísimas trancas nada como tomar fotos y enviarlas por el celular diciendo bolserías como "estoy en la misma cola de siempre". Y por supuesto uno también se vuelve más crítico.

Crítico porque los embotellamientos siempre tienen una causa. Causa humana las más de las veces. Como por ejemplo los terribles accidentes que ocurren a diario en la autopista. Son tan a diario, tan cotidianos, que nos insensibilizan. Pasa uno mirando aquel "coñastre" pensando "otro más", o algo más profundo y filosófico como "menos mal que no fui yo". Otra de las causas en estos tiempos son las construcciones en las vías. Hay en estas dos rutas diarias un par de construcciones mayores. La primera por supuesto es la del tren. Esta construcción no obstaculiza el tráfico de la autopista, pero impresiona. El movimiento de tierra, la cantidad de cemento que están usando, el cabillero loco que va cubriendo kilómetros y kilómetros. Ve uno la construcción y siempre se va preguntando bolserías en el tráfico. Preguntas como "cómo carrizo irán a hacer con la bomba esa, a lo mejor la tumban". La segunda construcción es una bendita modificación que todavía no acabo de entender en la entrada de Turmero en un sitio llamado como el "distribuidor las banderas". No hay ni han habido banderas allí, pero así se llama el sitio. Supongo que por las astas peladas que todavía están en una abandonada placita. Pero la construcción va bien. Lo que uno critica quizás es que el plan de proyecto es enredado. Es como el hueco que hizo Hidrocentro hace poco en la entrada de mi urbanización. Llegaron, rompieron todo, repararon el tubo que tenían que reparar, y taparon. Claro, taparon con tierra, dejaron el piedrero y el tierrero, nada de asfalto, es decir una chapuza. Lo del distribuidor no creo que sea así pero igual uno ve interrupciones en el trabajo y lentitud que son medio inexplicables. Pareciera como que los contratos son a pedacitos. Contratos que son para gastar los reales sin pensar en que la obra puede que no esté terminada con esos recursos. Y así las dejan, a medias. Los usuarios que se jodan. Total, no tienen Hummers como la que exhibe el contratista municipal en el distribuidor.

Los días y el tráfico pasan. Todos nos quejamos. Pero nos reconfortamos con un original pensamiento que nos une a todos los que vivimos por estos lares: al menos no vivimos en Caracas. Y con una sonrisa maquiavélica recordamos a todos nuestros conocidos caraqueños que siguen creyendo que ese gigantesco estacionamiento es una ciudad.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo vivo en Maracaibo y el tráfico se está volviendo horrible, casi como en Caracas. Todo el mundo anda loco comprando carro porque en general el transporte público es muy deficiente e inseguro, y porque los préstamos como que los están regalando. Esto, por supuesto, empeora las cosas, porque el 90% de los carros lleva solo 1 persona.

Cambiando un poco de tema, pero siguiendo con lo del tráfico, imagínate que unos "inteligentísimos" militares decidieron poner unos policías acostados en frente de su hospital en la avenida Fuerzas Armadas, que es una vía rápida de la ciudad, y se arman unas colas horribles a raíz de estos dispositivos. No me imagino que pasará cuando una ambulancia quiera llegar a las emergencias en plena hora pico. Militares REbrutos!

Waiting for Godot dijo...

En tierra de ciegos el tuerto es el Rey.

Anónimo dijo...

El problema del trafico tiene mucho mas que ver con la conducta de los conductores que de insuficiencia de vias o exceso de vehiculos.
Si entiendes ingles romrod, te recomiendo leas este articulo sobre como un solo vehiculo puede aliviar sustancialmente una cola.
http://www.amasci.com/amateur/traffic/traffic1.html