Esta mañana nos levantamos tarde así que pensábamos que la cola iba a ser kilométrica como las últimas veces. Al llegar al centro de votación nos sorprendimos, la cola era corta, tal vez de unas doscientas personas. Llegamos como a las siete de la mañana y ya a las nueve habíamos votado. Nos quedamos un rato más hablando con amigos y conocidos y ya a las diez y media la cola había desaparecido. A partir de esa hora el que quería votar simplemente entraba al centro de votación y lo hacía en menos de cinco minutos.
¿Abstención? La verdad es que no tengo la más mínima idea. Puede ser una ilusión provocada por lo rápido del sistema de votación y porque ahora hay menos votantes allí. Pero también puede ser que la gente se quedó en su casa.
Entiendo que la situación era similar en otros centros cercanos. Aunque en otros parecía que era como siempre a juzgar por el gentío. Pero el ánimo de todos estaba en alto. La colas, a excepción de algunos casos muy aislados, lucen animadas llenas de gente deseosa de votar.
La foto es de mi centro de votación muy temprano en la mañana, había un gentío a esa hora.
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