El clima post electoral

Ya hoy es miércoles, todo vuelve a la normalidad tras las elecciones del domingo. Los analistas de bando y bando siguen echando al aire sus sesudas conclusiones. Que si gané yo, que si perdiste tu. Análisis que supongo solamente callará el ya cercano ambiente navideño.

Ayer pasaron algunas cosas desagradables. Al menos aquí cerca de donde vivo. La alcaldía de Turmero fue objeto de una trifulca entre gente de la alcalde recién electa y los del alcalde saliente. Dicen los del PSUV que ellos estaban allí para preservar la alcaldía ya que los derrotados pretendían sustraer bienes y computadoras. No se la verdad. Lo que si es cierto es que el episodio terminó con heridos de bala, un diputado de Podemos preso, que parece que fue el que tuvo la genial idea de usar un arma de fuego, golpiza colectiva, intervención de la policía y la GN y, lo que es peor, una total incertidumbre sobre la estabilidad laboral de los empleados de esta alcaldía.

Y no es primera vez que estas cosas ocurren. Recuerdo que cuando el hoy derrotado alcalde de Cagua Carlos Augusto León tomó posesión de la alcaldía sus compañeros de partido vinieron y sacaron a patadas a los de la anterior administración, que también eran chavistas por cierto. Esta vez, el alcalde electo al menos dijo que no iba a ser así a lo salvaje, sino que se iba a hacer un transición ordenada.

Pareciera que en este tipo de cosas es la testosterona y la adrenalina lo que manda. Siempre se repiten estos casos. Cada vez que hay una elección se trata a los anteriores como si fueran unos delincuentes. Bueno muchos lo son, pero para decirlo abiertamente habría que llevarlos a juicio como dictan las leyes. Mientras no se demuestre lo contrario se supone que todos somos inocentes.

Otro caso reportado ayer es el denunciado en Miranda. Otra situación altamente irregular donde los victoriosos se creen con el derecho de pisotear todo.

Creo que nos hace falta urgentemente una ley con su reglamente que norme las transiciones en las alcaldías y gobernaciones para que estas cosas no pasen. Debiera haber hasta un calendario para efectuar el traspaso de poder y para que los planes en marcha y el bienestar de los empleados públicos que hacen carrera en esos lugares no se vean afectados.