Hoy recibí varios mensajes por el servicio de mensajería instantánea preguntándome por la situación en el país. Que como iba la marcha.
A lo que yo les respondí con toda sinceridad: ¿cuál marcha? no se de que me hablas.
Estos últimos días he estado tan ocupado que no he tenido mucho tiempo para leer las noticias y como por donde transito diariamente no hay ni marchas ni protestas ni nada, pues simplemente todo tiene apariencia de normalidad.
Pero la cosa está normal sin estarlo. Hay como una especie de gran preocupación en el ambiente. Todos hablan de lo mismo, de las protestas estudiantiles, de la reforma, de Baduel, de los militares, de Chávez y sus incendiarias arengas. Aun cuando todos seguimos con nuestros diarios quehaceres lejos de los sitios donde pudieran estar llevándose a cabo violentos disturbios.
Todo normal, las neveras siguen sin leche, los huevos casi no se consiguen, y sigue escaseando la harina. El azúcar ya no escasea... simplemente desapareció del mapa, ya sospecho de los extraterrestres.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario