Una de las estupideces del socialismo centralista es la de pretender que todas las interacciones comerciales humanas pueden ser intervenidas y reguladas por el poderoso Estado. A mi sencillamente me parece una estupidez. Sobre todo porque son esquemas que ya probamos en los setenta y ochentas y no funcionaron.
Veamos el caso del bollo de pan. Ese que nosotros llamamos comunmente "pan francés". Resulta que su precio está regulado por el gobierno actual. No recuerdo el precio pero uno obtiene algo así como ocho bollos de pan por unos BsF 2. Pero no hay. No hay manera de conseguir pan francés. Los panaderos decidieron que con el actual precio de la harina de trigo y sus costos operativos pues no les es negocio hacer pan francés. ¿La alternativa? Rescatar nuestro criollísimo "pan sobado". El cual tiene otra receta para su preparación. Creo que tiene un poco de mantequilla por encima para hacerlos ver más brillantes. Es distinto pues. Pero pan es pan, solo que este no tiene el precio controlado y unos ocho bollos de pan pueden costar, de acuerdo a su peso, unos BsF 8.
El mercado no es más que el lugar donde se encuentran libremente vendedores y compradores. No es algo malvado donde solamente los vendedores son los que llevan la palabra. No. Es el resultado de la libre interacción de nosotros los individuos de esta sociedad.
Lástima que la ceguera oficial tenga como resultado el sacrificio del sabroso pan francés.
3 comentarios:
Lo mas seguro es que lo recordemos y nos calemos “pan cubano” dentro de unos días, vamos es pá bajo chamo con este gobierno.
por cierto, no es un secreto que el precio de la harina de trigo está subiendo a nivel mundial....así que la cosa es una tendencia global.
Hasta pronto!
Y tantas otras cosas, tantas muchas otras. Besos.
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