Esto era lo que veía esta mañana de camino a la oficina. Carros, carros y más carros. El tráfico maracayero de estos últimos años hace que uno se le vaya la mente por completo mientras lentamente se dirige a cualquier sitio. Me dio tiempo hasta de pensar en el satélite este que el gobierno le compró a los chinos y que hoy fue lanzado a la órbita geoestacionaria en medio de un gran esfuerzo propagandístico de la revolución chavista.
Pero la pregunta es, ¿vale la pena este esfuerzo? ¿vale la pena que compráramos este satélite?
Yo la verdad creo que si. El satélite será usado para llegar a zonas remotas y llevarles aunque sea Telesur y VTV. Claro, también telefonía e internet. Eso es positivo creo yo. Y ni siquiera salió tan caro, creo que se deben haber gastado unos US$500 millones a lo sumo.
Otra cosa que me parece muy positiva es que se haya entrenado a un montón de ingenieros venezolanos en esto de controlar satélites. Muy bueno eso. Hasta se construyó un par de estaciones rastreadoras nuevas por allá en El Sombrero en Guárico y otra en Luepa en el estado Bolívar. Todo con la última tecnología de telecomunicaciones.
Pero, aunque por algo se empieza, todavía estamos muy lejos de estar en la era espacial. Yo sueño con que esto sea el comienzo de un verdadero plan para insertarnos en la verdadera conquista del espacio. Algo mucho más allá que nada más llevarle La Hojilla y Aló Presidente a todo el continente.
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