El Metro sin milímetros

Que maravilloso sistema de transporte subterráneo. Uno cómodamente llega a espaciosas estaciones donde un moderno sistema de venta de boletos le permite a uno rápidamente abordar uno de estos silenciosos trenes que viajan bajo la superficie de Caracas. Allí entre los simpáticos habitantes de la capital Ud. podrá disfrutar de un cómodo viaje en un moderno tren con aire acondicionado que en un tris le llevará a su destino.

No. La cosa no es como en los comerciales. Hoy a mediodía regresando de mi charla en Flisol 2006 con mi amigo Aníbal tuve una de esas experiencias terroríficas que significan viajar en el famoso Metro de Caracas. La vaina es un gentío, empezando con las colotas para comprar boletos. Pero no un gentío normal... un super gentío. Como que no había suficientes trenes o que se yo que pasaba pero la cosa estaba tan congestionada que ya parecía el metro de Tokyo. Pero sin los empujadores esos que uno ve en fotos con pulcros guantes blancos. No, nada que ver, los andenes completamente llenos y los trenes pasaban también super llenos. Además los empujadores aqui son un montón de desesperados que quieren montarse en el tren a como dé lugar. Y cuando yo creía que no cabían más... pues si cabían. Y muchos más. Tantos que ya estaba preocupado por la presión y empezaba a pensar en como iba yo a hacer para navegar entre tanta gente para llegar a la puerta más cercana cuando mi tren llegara a su destino. Ni un milímetro cuadrado disponible en el tren donde íbamos. Hasta peligroso me pareció cuando ví que por un pelito no asfixian a un pobre niñito que creo tenía unos ocho años.

Afortunadamente sobrevivimos.

Moraleja... evita las horas pico en el metro. Y nada como vivir en este monte. Acabo de oir a un mosquito volando como a una cuadra de aqui...